¿Te preocupan tus molestias en la zona anal? Entender la diferencia entre prolapso rectal y las hemorroides es importante para ponerle remedio a tu condición cuanto antes. Aunque estas afecciones comparten algunas similitudes, sus causas, síntomas y tratamientos son diferentes.
A continuación, vamos a explorar las características únicas de cada una, proporcionándote la información necesaria para identificarlas y buscar el tratamiento adecuado. ¡Comencemos!
Síntomas de las hemorroides
Las hemorroides (o almorranas) son venas hinchadas en el ano y el recto inferior. Cuando se inflaman, causan molestias que afectan tu calidad de vida. Conocer los síntomas de las hemorroides te ayudará a reconocerlas y buscar tratamiento oportuno.
Las almorranas presentan comúnmente estos signos [1]:
- Sangrado anal leve o moderado al evacuar las heces.
- Picazón e irritación en el ano.
- Inflamación.
- Dolor en la zona perianal.
En el caso de que notes pequeños bultos cerca del ano, podría tratarse de una hemorroide trombosada. De ser así, el médico debe realizar una intervención quirúrgica inmediata [1].
Cómo prevenirlas
Prevenir las almorranas es posible con algunos cambios en tu estilo de vida. Por eso, adopta estos hábitos para reducir el riesgo de desarrollarlas:
- Consume una dieta para hemorroides rica en fibra: incluye frutas, verduras y granos integrales en tus comidas diarias. La fibra ablanda las heces y facilita su paso, reduciendo el esfuerzo al defecar.
- Bebe abundante agua: apunta a 8 vasos diarios como mínimo. El agua ayuda a la fibra a hacer su trabajo y previene la deshidratación, que genera estreñimiento.
- Evita pasar mucho tiempo sentado en el inodoro: la presión prolongada aumenta el riesgo de hemorroides. Limita tus visitas al baño a no más de 10 minutos. Si no evacúas en ese tiempo, es mejor que lo intentes más tarde.
- Practica ejercicio regularmente: la actividad física mejora la circulación y previene el estreñimiento. Caminar, nadar o andar en bicicleta durante 30 minutos al día marcará la diferencia. Infórmate sobre la relación entre hemorroides y ejercicios para entender cómo la actividad física adecuada beneficia tu salud anorrectal.
- Mantén un peso saludable: el sobrepeso aumenta la presión en las venas del ano y recto. Combina una dieta equilibrada con ejercicio regular para alcanzar y mantener un peso adecuado según tu estatura.
- No ignores la necesidad de ir al baño: retrasar las evacuaciones, endurece las heces y dificulta su paso. Atiende el llamado de la naturaleza cuando lo sientas, evitando forzar o esforzarte excesivamente durante la defecación.
Causas del prolapso rectal
El prolapso rectal ocurre cuando la pared del recto se desliza hacia el exterior del ano. Este trastorno puede afectar a los adultos por diversas razones [1]:
- Esfuerzo excesivo al defecar debido a episodios de estreñimiento.
- Daño en los tejidos a causa de cirugías o partos.
- Debilidad de la musculatura del suelo pélvico asociada al envejecimiento.
Síntomas más frecuentes
Los factores que indican la presencia de un prolapso rectal son [1]:
- Incontinencia fecal, resultando en evacuaciones inesperadas.
- Sensación de humedad en la zona anal, debido a la secreción de mucosidad o sangre.
- Urgencia para ir al baño.
- Evacuaciones de heces en cantidades muy pequeñas.
- Malestar en la zona anal que incluye dolor, comezón, irritación y sangrado.
- Aparición de un tejido rojizo que sobresale del ano, similar en apariencia a una hemorroide externa inflamada.
Es importante no confundir estos síntomas con los de las hemorroides, ya que requieren un abordaje diferente. Si experimentas alguno de estos signos, especialmente el último, consulta a un médico para obtener un diagnóstico preciso.
Tratamientos para combatir el prolapso rectal
Por lo general, el abordaje del prolapso rectal en adultos requiere de intervención quirúrgica. No obstante, existen medidas conservadoras que ayudan a tratar esta afección y, en algunos casos, evitar la cirugía [1]:
- Reintroducción manual: en casos leves, el médico introduce manualmente el tejido prolapsado.
- Prevención del estreñimiento: una dieta rica en fibra y una hidratación adecuada son fundamentales para mantener las heces blandas y evitar esfuerzos excesivos durante la defecación.
- Fortalecimiento del suelo pélvico: los ejercicios de Kegel promueven la tonificación de la musculatura que sostiene los órganos pélvicos, mejorando así los síntomas del prolapso.
- Técnicas de defecación adecuadas: es importante evitar el esfuerzo excesivo al evacuar. En caso necesario, puedes utilizar productos específicos para ablandar las heces, siempre bajo supervisión médica.
- Higiene adecuada: el uso de toallitas suaves y productos diseñados para la higiene íntima reduce la irritación y el picor asociados al prolapso.
Conclusión: ¿es lo mismo prolapso rectal que hemorroides?
No, el prolapso rectal y las hemorroides son afecciones distintas, aunque ambas afectan la zona anal. Mientras que la primera ocurre cuando parte de la pared del recto sobresale por el ano, las almorranas, en cambio, son venas inflamadas en el ano o recto inferior. Estas últimas pueden manifestarse como hemorroides sangrantes, un síntoma que a menudo causa preocupación.
El prolapso rectal es más común en mujeres. De hecho, hay estudios que indican que el 80% de los casos se presentan en población femenina [2].
Aunque ambas afecciones son diferentes, pueden estar relacionadas. Un prolapso de la mucosa rectal podría ser consecuencia de hemorroides crónicas. Sin embargo, son trastornos distintos que requieren enfoques de tratamiento específicos.
Tu salud anorrectal merece atención y cuidado. Si notas molestias o cambios en tus hábitos intestinales, no lo ignores. Saber diferenciar entre prolapso rectal y hemorroides es el primer paso para buscar el tratamiento oportuno.
REFERENCIAS
- Desmonts, Juan (2019, 13 diciembre). Prolapso rectal y hemorroides. ¿Es lo mismo? © Dosfarma Blog. Disponible en: https:// www.dosfarma.com/blog/prolapso-rectal-y-hemorroides-es-lo-mismo/
- Doctor Rocamora (2017, 30 enero). Diferencia entre prolapso y hemorroides. Disponible en: https:// www.doctorrocamora.com/2017/01/30/diferencia-entre-prolapso-y-hemorroides/