Los ejercicios de Kegel para hemorroides son una solución natural al alcance de tus manos. Si has experimentado las molestias de las hemorroides, sabrás que cualquier alivio es bienvenido. ¿Habías considerado la relación entre hemorroides y ejercicio? No es necesario realizar una maratón, los simples y efectivos ejercicios de Kegel serán un buen aliado.
Estos movimientos, tradicionalmente asociados con la salud pélvica en mujeres tras el parto, pueden ser un recurso valioso para quienes sufren de hemorroides. Acompáñanos y descubre sus beneficios, cómo hacerlos de forma correcta, qué resultados puedes esperar y las posibles contraindicaciones.
Qué son los ejercicios de Kegel para las hemorroides
Cuando escuchamos hablar de ejercicios de Kegel, automáticamente pensamos en el fortalecimiento pélvico postparto. Sin embargo, la relación entre los ejercicios de Kegel y hemorroides es menos conocida.
Estos ejercicios se enfocan en tonificar los músculos del suelo pélvico. Al fortalecer esta área, se mejora el soporte de las venas y tejidos rectales, reduciendo así la presión que puede dar origen a las hemorroides o agravarlas.
Principales beneficios de hacer ejercicios de Kegel para hemorroides
Los ejercicios de Kegel ofrecen un enfoque proactivo y no invasivo para prevenir y aliviar las hemorroides. Con dedicación y práctica regular, pueden ser una herramienta valiosa para mejorar la salud pélvica y general.
Entre otros beneficios, previenen y alivian las hemorroides, mejoran la circulación, reducen el estrés en el recto, promueven evacuaciones más regulares, favorecen la cicatrización y mejoran la calidad de vida.
Mejora tus problemas de incontinencia urinaria y fecal
Al fortalecer los músculos del suelo pélvico, responsables de sostener la vejiga y el recto, los ejercicios de Kegel mejoran el control sobre la retención y liberación de orina y heces, reduciendo así los problemas de incontinencia urinaria y fecal.
Previene los prolapsos
Los ejercicios de Kegel fortalecen los músculos del suelo pélvico que sostienen las venas rectales. Al tonificar estos músculos, se brinda un mejor soporte a las venas rectales, reduciendo el riesgo de que se debiliten y desciendan. Esto previene las hemorroides prolapsadas, en las cuales las venas sobresalen del ano.
Mejora las relaciones sexuales de pareja
Los ejercicios de Kegel tonifican y fortalecen los músculos del suelo pélvico, mejorando la sensación y control durante el acto sexual. En el contexto de hemorroides y sexo anal, unos músculos pélvicos fuertes pueden reducir el malestar, haciendo la experiencia más cómoda y placentera.
¿Cómo se hacen los ejercicios de Kegel para hemorroides?
El proceso para realizar ejercicios de Kegel, aunque sencillo, requiere precisión y constancia. La meta es tonificar y fortalecer el suelo pélvico, lo que es útil no solo para quienes sufren de hemorroides, sino también para aquellos que buscan prevenirlas.
Paso 1: identifica los músculos correctos
Necesitas identificar y aislar los músculos del suelo pélvico, que son los que trabajarás con los ejercicios de Kegel. Una manera fácil de localizarlos es intentar detener la micción a mitad de camino. Los músculos que sientes contraerse en ese momento son los que debes ejercitar. Otra forma es introducir un dedo en el recto y tratar de apretarlo; nuevamente, los músculos que sientes trabajando son los del suelo pélvico.
Paso 2: presta atención a la técnica
Una vez que hayas identificado los músculos correctos, es hora de concentrarte en la técnica:
- Acuéstate boca arriba o en una posición cómoda.
- Contrae los músculos del suelo pélvico y mantenlos contraídos durante 5 segundos, asegurándote de que estás contrayendo los músculos correctos y no los glúteos, el abdomen o los muslos.
- Relaja los músculos durante otros 5 segundos.
Repite este proceso 10 veces seguidas, asegurándote de mantener una respiración constante y de no aguantar el aliento.
Paso 3: mantente centrado y no te distraigas
Es esencial que, durante los ejercicios, tu atención esté centrada en los músculos que estás trabajando. Evita distracciones como la televisión o leer. Cierra los ojos si es necesario y visualiza los músculos contrayéndose y relajándose. El enfoque es crucial para garantizar que estés ejercitándote adecuadamente y así obtener los máximos beneficios de los ejercicios de Kegel.
Paso 4: repite los ejercicios 3 veces al día
Para lograr resultados efectivos, la constancia es clave. Repite la serie de 10 contracciones y relajaciones un total de 3 veces al día. A medida que los músculos se fortalezcan, puedes aumentar gradualmente el tiempo de contracción y relajación. Por ejemplo, pasa de mantener la contracción durante 5 segundos a 7 u 8 segundos.
¿En cuánto tiempo se comienzan a ver resultados?
La efectividad de los ejercicios de Kegel varía según la persona, su consistencia en la práctica y la correcta ejecución. En general, quienes los practican con regularidad y técnica adecuada comienzan a notar mejoras en su fuerza pélvica y reducción de síntomas relacionados con hemorroides o incontinencia en unas 4 a 6 semanas.
No obstante, es vital continuar con la práctica para mantener estos beneficios a largo plazo. Algunos pueden necesitar más tiempo para observar cambios significativos. Si después de algunos meses no se aprecian mejoras, es recomendable consultar a un profesional de salud y el deporte para obtener orientación específica.
Contraindicaciones para realizar los ejercicios de Kegel para hemorroides
Aunque los ejercicios de Kegel son generalmente seguros, existen algunas contraindicaciones:
- Hemorroides agudas: realizar Kegel durante un brote severo puede aumentar el dolor o el sangrado y hacer que la hemorroide reviente. Te invitamos a conocer qué hacer en caso de que se reviente una hemorroide con nosotros.
- Reciente cirugía pélvica o rectal: espera la autorización del médico antes de comenzar.
- Técnica incorrecta: si se realizan erróneamente, pueden agravar los síntomas.
- Infecciones activas: las infecciones urinarias o del tracto genital pueden empeorar con estos ejercicios.
Ante cualquier duda o molestia, es esencial consultar a un profesional de salud para que determine las causas de las hemorroides y nos de la solución más adecuada.