Las hemorroides que se forman fuera del recto, en el área anal, son las hemorroides externas. Suponen el mismo hemorror que las internas, pero sus síntomas son más sencillos de aliviar con productos y pautas que todos tenemos a mano. Es decir, sí es posible bajar la inflamación de las hemorroides externas.
Las hemorroides ocasionan picor, dolor, escozor, inflamación… Unos síntomas que pueden aliviarse con la alimentación, el estilo de vida, la postura, la aplicación de pomadas antiinflamatorias (como, por ejemplo, aquellas que incorporan antinflamatorios y efectos venotónicos, como la ruscogenina y la trimebutina, que está dotada de una triple acción antiespasmódica, anestésica y analgésica) o, si son más graves, con medicamentos antiinflamatorios que recete un médico o, en último caso, con cirugía.
¿Qué aumenta la inflamación de las hemorroides?
En cada persona, los factores que ayudan a la inflamación de las hemorroides pueden variar. Aunque, de forma general, existen algunas causas que colaboran en su inflamación:
- Estreñimiento: puede inflamar las hemorroides por la presión que ejercen las heces duras a la hora de evacuar y la tensión que se genera en la zona rectal y anal. Conoce la relación entre estreñimiento y hemorroides en nuestro blog.
- Dieta pobre en fibra: el escaso consumo de fibra favorece el estreñimiento.
- Diarrea cronificada: irrita la zona anal.
- Vida sedentaria: aumenta la presión en el área anal.
- Embarazo: la presión en la zona pélvica y el aumento de peso favorecen la inflamación de las hemorroides.
Un médico será el mejor aliado para ayudarnos a aliviar los síntomas de las hemorroides y evitar su inflamación.
Consejos para bajar la inflamación de las hemorroides
Es posible desinflamar las hemorroides externas rápidamente y aliviar así sus síntomas con algunas actuaciones que podemos incluir en el día a día:
- Evitar ropa ajustada y usar ropa holgada y de algodón u otro material transpirable.
- Aplicar compresas frías o calientes en la zona afectada.
- Aplicar hielo envuelto en una toalla durante 20 minutos cada hora.
- Tomar baños de asiento con agua tibia y manzanilla dos o tres veces al día durante 20 minutos.
- Aplicar aloe vera puro dos o tres veces al día.
- Aplicar pomadas con acción antiinflamatoria, espasmolítica y anestésica local.
- Tomar analgésicos como ibuprofeno o paracetamol.
Antes de tomar cualquier medicamento, es recomendable consultar con un médico.
Alimentos antiinflamatorios
Una dieta rica en fibra y con abundante agua es fundamental para una persona que sufre hemorroides. También existen algunos alimentos antiinflamatorios que pueden ayudar a los que sufren el hemorror:
- Frutas frescas como plátanos, bayas, manzana o kiwi.
- Verduras de hoja verde como espinacas, coliflor o calabaza.
- Cereales integrales, avena y quinoa.
- Frutos secos como nueces o almendras.
- Semillas como las de chía o lino.
- Grasas saludables como aguacate y aceite de oliva.
- Yogurt para, también, mejorar la salud intestinal.
- Agua para mantener las heces blandas y prevenir el estreñimiento.
Antes de realizar cambios significativos en la dieta, se debe consultar con un médico, especialmente si se toma algún tipo de medicamento.
Posturas para desinflamar hemorroides
Adoptar algunas posturas puede ser útil para aliviar la presión en la zona afectada por las hemorroides y disminuir sus síntomas.
- Acostarse sobre el lado izquierdo con las piernas dobladas para reducir la presión en la zona anal.
- De rodillas en el suelo con las nalgas sobre los talones y cabeza y hombros relajados.
- En cuclillas sobre los talones para abrir el canal anal y reducir la presión.
- Postura de la cobra: acostarse boca abajo y levantar el torso con ayuda de los brazos.
- Postura de la pelota de yoga: sentarse en una pelota de yoga y balancearla hacia adelante y hacia atrás para estimular la circulación.
- Postura del puente: acostarse boca arriba con las rodillas dobladas y los pies apoyados en el suelo y elevar la cadera durante unos segundos.
- Postura de la mariposa: sentarse en el suelo con las plantas de los pies juntas y las rodillas abiertas y sujetar los pies con las manos mientras se presiona hacia abajo.