Si tienes almorranas puede que haya llegado un momento de desesperación en el que ya no sabes qué hacer porque hay tantos tratamientos y soluciones que no sabes qué es lo más adecuado para ti. En este artículo vamos a contarte todo sobre la coagulación infrarroja para hemorroides. Una técnica especial para hemorroides internas y almorranas prolapsadas.
¿Qué es la coagulación infrarroja para hemorroides?
La fotocoagulación infrarroja (también llamada terapia de coagulación) es un procedimiento médico usado para tratar estos bultos internos de tamaño pequeño y mediano. Este tratamiento, como te comentamos al principio, es solamente para las hemorroides internas.
Durante el procedimiento, el médico usa un dispositivo que crea una línea intensa de luz infrarroja. El calor creado por la luz infrarroja produce tejido cicatricial, el cual interrumpe la circulación de la sangre a la hemorroide y produce que esta desaparezca y se forme una cicatriz en la pared del conducto anal.
El tejido cicatricial que se forma como resultado de la fotocoagulación infrarroja para tratar las hemorroides cumple una función importante: ayuda a mantener en su lugar las venas que están cerca de la zona tratada.
Normalmente, las almorranas aparecen cuando estas venas se hinchan o sobresalen en el canal anal, causando molestias y dolor. Si quieres saber más sobre cómo queda el ano después de una operación de hemorroides te recomendamos leer el artículo que tenemos dedicado a ello.
Una vez que el tejido cicatricial se ha formado, actúa como una especie de anclaje para estas venas, evitando que se inflamen. Esto es beneficioso porque reduce la posibilidad de futuras hemorroides en esa área específica y, por tanto, disminuye el riesgo de experimentar los síntomas asociados con esta condición. Este tratamiento confirma que es posible tratar las hemorroides sin dolor.
Solo se puede tratar una almorrana cada vez que se realiza el procedimiento. Más tarde, se puede repetir en intervalos de 10 a 14 días.
¿Para qué tipos de hemorroides se usa la coagulación infrarroja?
No todas las almorranas pueden ser sometidas a la coagulación infrarroja para hemorroides. Te contamos cuáles sí son idóneas para eliminar con esta técnica.
Hemorroides internas grado I
Las hemorroides internas de grado 1 son pequeñas y no prolapsan fuera del ano. Pueden causar sangrado leve durante la defecación, pero generalmente no causan dolor o molestias.
Hemorroides internas grado II
Las hemorroides internas de grado 2 son un poco más grandes y, en algunas ocasiones, prolapsan fuera del ano durante la defecación, pero vuelven a su lugar después de defecar. Pueden causar sangrado y dolor moderado.
¿Es dolorosa la coagulación infrarroja para hemorroides?
Si hablamos del nivel de dolor asociado con la coagulación infrarroja para hemorroides, es importante distinguir entre las sensaciones experimentadas durante y después del procedimiento.
Dolor durante el tratamiento para hemorroides
Durante la coagulación infrarroja, la mayoría de los pacientes experimentan una leve sensación de calor o una ligera molestia en la zona tratada. Esta sensación es temporal y no suele molestar demasiado.
En muchos casos, se utiliza un anestésico local para minimizar cualquier sensación incómoda. Esto hace que el procedimiento sea más cómodo para el paciente. Si quieres saber más sobre operar hemorroides en la seguridad social, haz clic en el enlace.
Dolor después de la coagulación infrarroja para almorranas
Tras la finalización del tratamiento, es común sentir una ligera presión en la región anal. Algunos pacientes también reportan una urgencia leve de evacuar, aunque esto no suele ser doloroso. Estas sensaciones post-tratamiento son generalmente de corta duración. Normalmente, cualquier molestia desaparece rápidamente y se pueden reanudar las actividades diarias sin inconvenientes.
Por lo que ves, es un procedimiento bien tolerado con un periodo de recuperación breve que permite a los pacientes continuar con su rutina normal con pocos o ningún inconveniente.
Eficacia en las hemorroides de la coagulación infrarroja
Cuando evaluamos la eficacia de la fotocoagulación infrarroja como tratamiento para las hemorroides, observamos que esta técnica resulta exitosa para una gran mayoría de los pacientes. Específicamente, entre 7 y 10 de cada 10 personas que se someten a este tratamiento experimentan mejorías significativas en sus síntomas, según Healthwise. Sin embargo, puede que los efectos no duren demasiado, siendo 2 de cada 10 los pacientes que podrían necesitar cirugía. [1]
Riesgos del tratamiento de coagulación infrarroja en hemorroides
El tratamiento de coagulación infrarroja, aunque es una opción segura y eficaz para muchas personas, conlleva algunos riesgos que son importantes considerar:
Sangrado del ano
Uno de los riesgos más comunes después de este tratamiento es un cierto grado de sangrado anal. Este sangrado suele ser leve y se resuelve sin intervención adicional, pero en casos raros, puede ser más persistente y requerir atención médica.
Infección en la zona anal
Aunque sea poco frecuente, existe un riesgo de que se desarrolle una infección en el área tratada. La higiene adecuada y la atención cuidadosa a cualquier signo de infección son cruciales. Si se presenta una infección, es probable que se requiera tratamiento con antibióticos. Si necesitas saber cómo limpiarse con hemorroides, haz clic en el enlace.
Incapacidad para orinar
Algunos pacientes experimentan dificultades temporales para orinar tras el procedimiento. Esto generalmente se debe a la hinchazón o los espasmos en el área pélvica cercana y suele ser un problema temporal que se resuelve por sí solo. Si tienes hemorroides y ganas de orinar, no te preocupes, es algo común de esta condición.
REFERENCIAS
- Cigna. (2023). Fotocoagulación infrarroja para las hemorroides. Recuperado de https://www.cigna.com/es-us/knowledge-center/hw/temas-de-salud/fotocoagulacin-infrarroja-para-las-hemorroides-hw212815