¿Te crean confusión los términos y desconoces la diferencia entre fístula y fisura anal? Es algo común. Aunque ambos problemas afectan la misma área, sus causas, síntomas y tratamientos varían de forma significativa. En este artículo, te explicamos cada una para que puedas entender la condición.
Además, exploraremos las causas comunes y los síntomas asociados tanto con las fisuras anales como con las fístulas. Ya sea que estés experimentando molestias o simplemente quieras informarte, sigue leyendo. ¡Recuerda, conocer es el primer paso para aliviar!
¿Cuáles son las diferencias entre fístula y fisura anal?
Aunque pueden confundirse, las fístulas y fisuras anales son condiciones distintas. Una fisura anal es básicamente una pequeña lágrima en el margen del ano que puede ser difícil de ver y es a menudo resultado de un engrosamiento anormal del esfínter anal interno. En cambio, una fístula anal es una especie de túnel que se forma entre el interior del ano o recto y la piel de la región perianal, originada por una infección en las glándulas anales. [1]
El dolor es predominante en las fisuras anales, manifestándose intensamente durante y después de la defecación. Por otro lado, la fístula anal se caracteriza por una supuración constante que puede causar episodios de dolor e inflamación cuando se infecta. [1]
En cuanto al tratamiento, las fisuras anales generalmente se manejan con métodos no invasivos y solo se recurre a la cirugía si estos métodos no son suficientes. Las fístulas anales, sin embargo, requieren de intervenciones quirúrgicas. [1]
Ambas condiciones afectan de manera significativa la calidad de vida; las fisuras por el dolor agudo y las fístulas por la molestia de la supuración, así como posibles problemas dermatológicos asociados.
Causas de la aparición de las fístulas y las fisuras anales
Las fístulas y fisuras anales, aunque comparten una localización común, tienen orígenes y manifestaciones diferentes. La fisura anal generalmente se desarrolla debido a un engrosamiento anormal del esfínter anal interno, que puede ser provocado por el trauma de defecaciones duras y secas, lo que conduce a desgarros en la mucosa anal. Por otro lado, la fístula anal surge a raíz de una infección en las glándulas ubicadas dentro del recto. Esta infección puede evolucionar creando un canal o túnel que comunica el recto con la piel de la región perianal. [2]
Te invitamos a conocer más sobre las fisuras anales por diarrea y sobre las fisuras anales por sexo anal en otras entradas del blog.
Síntomas de las fístulas y las fisuras anales
Las fisuras y fístulas anales, aunque ubicadas en regiones similares, presentan síntomas distintivos que afectan de manera diferente la calidad de vida de quien las sufre. Las fisuras anales se caracterizan principalmente por dolor intenso, especialmente notorio durante y después de la defecación. Además, los pacientes pueden experimentar picor, escozor y sangrado, lo que a menudo lleva a evitar la defecación por el temor al dolor, exacerbando así el estreñimiento y potencialmente empeorando la condición. [1]
Por otro lado, las fístulas anales típicamente se manifiestan a través de la supuración intermitente. Este síntoma puede ser menos molesto inicialmente, pero puede complicarse con episodios de dolor e inflamación si la fístula se infecta. Aunque algunas fístulas pueden ser asintomáticas y no alterar significativamente la vida diaria, otras pueden causar incomodidad constante y dermatitis irritativa debido a la secreción que mancha la ropa interior [1].
¿Cuándo se debe acudir al médico por fístulas y fisuras anales?
Ambas condiciones pueden requerir su atención médica oportuna; las fisuras anales pueden permanecer silentes por periodos, pero exacerbarse rápidamente [1], mientras que las fístulas necesitan intervención quirúrgica para prevenir complicaciones serias como abscesos anales [1].
Es importante consultar a un especialista para recibir un diagnóstico adecuado y comenzar con un tratamiento efectivo, especialmente en casos donde los síntomas se vuelven incapacitantes. Conoce en profundidad que es una fisura anal crónica en nuestro blog.
¿Cuál es el tratamiento para las fístulas y las fisuras anales?
El tratamiento de las fisuras y fístulas anales varía debido a la naturaleza de cada condición. Para las fisuras anales, el enfoque inicial es no quirúrgico, incluyendo el uso de medicamentos tópicos y antiinflamatorios. La operación de fisura anal se considera solo cuando los métodos conservadores no son efectivos [2].
Entre los medicamentos tópicos encontramos Proctolog Pomada, indicado para aliviar las fisuras anales y las crisis hemorroidales y cuyo titular es el laboratorio Desma. Gracias a sus ingredientes, como la ruscogenina y la trimebutina, aporta alivio cuando más se necesita.
En contraste, el tratamiento de las fístulas anales es predominantemente quirúrgico debido a su complejidad. La cirugía busca eliminar el trayecto inflamatorio y puede variar en extensión según las características específicas de la fístula, como su tamaño y ubicación. [2]
REFERENCIAS
- Medline Plus. (2023). Cuando usted tiene diarrea. Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos. https://medlineplus.gov/spanish/ency/patientinstructions/000121.htm#:~:text=C%C3%B3mo%20aliviar%20la%20diarrea-&text=El%20agua%20es%20lo%20mejor,saladas%2C%20sopa%20y%20bebidas%20rehidratantes
- Middlesex Health (31 de diciembre de 2022). Fisura anal. https://middlesexhealth.org/learning-center/espanol/enfermedades-y-afecciones/fisura-anal
ES-2024-04-PROC-08
